Escrito por Radio Reloj
En junio, el Vaticano dio a conocer la encíclica del Sumo Pontífice titulada Laudatosi, es decir Alabado seas, en la que expresó profundos argumentos teológicos, científicos y morales para desarrollar urgentes estrategias de cara al cambio climático.
Esa ha sido la primera encíclica emitida por Iglesia Católica que tiene como tema central la preocupación por ese asunto.
En un texto de 192 páginas, el Obispo de Roma describió el daño a la naturaleza como una señal de la crisis ética, cultural y espiritual de la modernidad.
Salvar el planeta es salvar a los pobres, subrayó el Papa Francisco
Contra la injusticia
En julio, durante una visita a Bolivia, el Papa Francisco lanzó duras críticas al capitalismo en una reunión con líderes y dirigentes sociales de Latinoamérica.
Este sistema ya no se aguanta, no lo aguantan los campesinos, no lo aguantan los trabajadores, no lo aguantan las comunidades, no lo aguantan los pueblos y tampoco lo aguanta la hermana Madre Tierra, subrayó el Sumo Pontífice.
También aseguró que los monopolios son una desgracia, y que el capital y el dinero son el estiércol del demonio.
Esas afirmaciones, como muchas otras, son expresión de la vocación de un Papa que ha puesto en el centro de su trabajo al frente de la Iglesia Católica.
La vocación por la justicia social y el bien común acercan a Francisco a las grandes masas de desposeídos y convierten su ejercicio en un Papado muy terrenal.