
No citaré el medio, pues no me sumaré a darle publicidad a quien no lo merece, pero nuestros lectores guatemaltecos seguramente sí sabrán de qué y a quiénes nos referimos. Tampoco cometería un error si lo hago, pues con total desfachatez mencionan alguna que otra vez a Cuba, con total desconocimiento de la realidad, yo diría que hasta con perversidad.
Me asombran las comparaciones desafortunadas en contra de Venezuela y Cuba. Es como tener el techo de vidrio y tirarle piedras al vecino. No caeré en la falta de ética de estos editoriales de querer comparar manzanas con mangos. Por ser frutas, no son lo mismo.
Solo diré a favor de Venezuela, que sería muy bueno profundizar en todo lo que en materia de salud, educación (hace muchos años fueron declarados por la UNESCO territorio libre de analfabetismo), garantías ciudadanas, seguridad, entre otros aspectos, constituyen un patrón a seguir para muchos países de la región donde contradictoriamente prima lo contrario aun en pleno siglo XXI. Lo más triste, es que no hay soluciones a corto plazo a través de los modelos imperantes.
De Cuba no hay que extenderse en explicaciones, los lectores afortunadamente tienen acceso a la verdad y a lo que con mucho esfuerzo, con un criminal bloqueo del país más poderoso del mundo, se ha logrado en todos los índices medibles por Naciones Unidas, lo que nos sitúan con la mayor modestia, entre los primeros en el mundo con programas a favor de sus ciudadanos.
¿Por qué estos macabros medios en Guatemala no hablan de la colaboración cubana en este país? ¿Saben que Cuba es según investigaciones serias realizadas por especialistas en la materia, el principal donante de ayuda oficial al desarrollo no solo en Guatemala, sino en América Latina y el Caribe? ¿Qué les impide ver la realidad? Es muy probablemente que su propio desconocimiento sobre la realidad y la mirada indiscreta y vergonzante hacia la casa del vecino, les impida ver qué sucede en casa propia.
Me agradaría exhortar a estos medios a que profundicen en el conocimiento de sus circunstancias, pero no solo con el ánimo de la crítica, sino para sumarse a la búsqueda de soluciones sociales para el bien común.
No pretendemos en lo más mínimo que nos agradezcan, pero deben tener en cuenta que más de 153 mil ciudadanos de este país, probablemente puedan comprar y leer sus medios, gracias a Cuba; no estoy diciendo un disparate. Gracias al método de alfabetización cubano “Yo Sí Puedo” que ha llevado la luz del saber a los más apartados y oscuros lugares de esta geografía, los que antes no podían hacerlo, hoy agradecen a esa pequeña isla bloqueada el poder leer y escribir. Por suerte también, son menos los engañados hoy en el mundo.
Estamos por cumplir el 5 de noviembre próximo, 20 años de presencia permanente de la Brigada Médica Cubana en Guatemala. Es el único país que por más tiempo ha permanecido junto al pueblo guatemalteco y en los lugares donde muchas veces los propios nacionales temen acercarse por las deprimentes condiciones. Cuba no mira, ni mirará nunca dónde se vive mejor, sino donde está el deber; es la enseñanza de Fidel que con orgullo patrio llevamos en nuestros corazones por tradición internacionalista.
Solo cito algunos datos y aclaro que es para que estos “medios públicos” aprendan de lo que sucede en su país. Existe un mundo más allá del asfalto que ruedan sus modernos autos y se los demostraré solo con algunas cifras que hablan sobre la colaboración de la Brigada Médica Cubana (BMC) en Guatemala, de ese país que llaman “régimen totalitario” y que nos lleva a pensar si eso que llaman así y favorece a la mayoría, es lo que necesitamos muchos, más allá de ideologías de cartón.
La BMC atiende a 3 millones 075 mil 834 ciudadanos de este país; la edad promedio de nuestros colaboradores es de 45 años de edad y el 62,9% son mujeres lo que a nuestro juicio es la mayor fortaleza (algo que seguramente esos medios nieguen). Su presencia con profesionales está distribuida en 45 centros de salud, 33 puestos de salud, 11 CAIMI, 72 en hospitales, 12 en los 4 centros oftalmológicos con operaciones GRATUITAS de la vista; 15 en áreas de salud, 21 en centro de atención permanente, entre otros.
El acumulado histórico (1998-2017) de atención y hasta noviembre de 2017, está en 42 millones 818 mil 306 ciudadanos guatemalteco(a)s atendido(a)s. Se han realizado 392 mil 442 cirugías en varias especialidades. Las tasas de mortalidad infantil y materna donde está la BMC es la más baja no solo del país, sino de la región centroamericana. Se han salvados cerca de 400 mil vidas. Se capacitan a comadronas, líderes comunitarios, equipos de salud y un sin fin de logros obtenidos.
Muy lejos está Cuba de la vanidad y de decir lo que hacemos. Al menos pido que los que no son capaces de sacrificarse por los demás, como dijera el Apóstol José Martí, tengan al menos el decoro de callar ante los que se sacrifican.
Disculpen la extensión, no pensé hacerlo, pero estamos obligados a defender valores en los que creemos y que defenderemos, al precio de cualquier sacrificio. Ese es el Socialismo cubano, el nuestro, el genuino y el que queremos los que vivimos en la Isla. La elección de cada país es libre y soberana. Exhorto a hacer más por lo nuestro y a dejar de ver la paja en el ojo ajeno. Al menos como precepto bíblico cúmplanlo.
*Embajador de Cuba en Guatemala