En una maniobra agresiva, para quebrar y desplazar el desarrollo general de los comicios presidenciales, se realizó un motín en la sede del Servicio Bolivariano de Inteligencia (SEBIN), donde figuras políticas tomaron voz para darle ampliación mediática, saliendo a relucir la de Joshua Holt, que por ser de origen estadounidense, genera las condiciones para una intervención más acentuada del gobierno de los Estados Unidos en los asuntos internos de Venezuela.
En la difusión de videos que formaron parte del escenario planificado y viralizados por las plataformas digitales que operan como agentes de propaganda antigubernamentales, aparece Holt pidiendo la intervención extranjera y activando rápidamente al encargado de negocios de la embajada estadounidense, Todd Robinson, en la conducción de las acusaciones hacia el Estado venezolano, avivando las tensiones diplomáticas entre ambos países a pocas horas de las elecciones presidenciales, donde Washington espera responder reforzando sus agresiones contra el país.