El gobierno de Nicaragua rechazó este martes los recientes actos de vandálicos perpetrados por grupos violentos en el país.
La vicepresidenta Rosario Murillo hizo un llamado a respetar los acuerdos de la comisión de mediación y testigo del diálogo nacional.
“¿Por qué seguimos empeñados en destruir, en esos ataques de odio contra las familias nicaragüenses? ¿Por qué no cumplimos con los acuerdos de la comisión?”, señaló Murillo.
La vicepresidenta nicaragüense indicó que continúan las agresiones y los bloqueos de vías (tranques) en la nación.
De igual manera, lamentó los incendios y saqueos contra la propiedad pública y privada en la ciudad de Masaya (oeste), los cuales causaron grandes pérdidas económicas.
Murillo instó a trabajar unidos “para instalar de verdad y de corazón las mesas de diálogo, para cumplir con las propuestas que emanen de ellas, por el bien de Nicaragua”.
Las protestas iniciaron el pasado 18 de abril contra reformas del gobierno al seguro social, las cuales fueron derogadas por el gobierno nicaragüense. Pese a ello no se detuvieron las protestas, se le sumaron otras demandas políticas y se ha incrementado el número de actos vandálicos.
Las reformas al seguro social fueron un pretexto para poner en marcha un plan dirigido desde el exterior con el fin de desestabilizar la nación y provocar el derrocamiento del gobierno de Daniel Ortega, receta que se intentó implantar hace unos meses en Venezuela.
La Esquina Roja 